Un profesional en administración de empresas, con énfasis en finanzas y relaciones internacionales y con tres años de experiencia, sale al mercado laboral a buscar un puesto de trabajo que se adecue a su perfil. Pasa hojas de vida, va a las entrevistas que le programan, presenta las respectivas pruebas psicotécnicas, pero nunca recibe una llamada para darle la tan esperada noticia de ser contratado ¿qué pasó?
Hoy en día las organizaciones necesitan de un grupo de cualidades, aptitudes y características para elegir a un candidato. Si bien el pasaporte de entrada a un proceso de selección es la hoja de vida, existen otros factores importantes para tomar la decisión de contratar a un aspirante.
Currículum admirable. Según Andrea Gómez, consultora sénior, la preparación de la hoja de vida es una fase destacable en la búsqueda de trabajo. Usted debe recoger información previa de su experiencia laboral, formación académica, sus conocimientos adicionales como sistemas, idiomas, programas, y por último, las referencias personales.
Es importante destacar los logros laborales cuantitativos y cualitativos que se han obtenido; así como listar la experiencia laboral relevante, dependiendo de la oferta que se vaya a aplicar. No se trata de tener un listado extenso de información sino aquello que resulte crítico o necesario para la oferta que se está aplicando.
Experiencia laboral relevante. De acuerdo con una encuesta realizada por www.aliadolaboral.com a más de 500 representantes de organizaciones y profesionales de gestión humana de todo el país, el 94% de las empresas tiene como prioridad a la hora de escoger a un candidato, los cargos desempeñados anteriormente.
En caso de que usted no cuente con experiencia laboral deberá mostrar otro tipo de destrezas, que hayan sido adquiridas por medio de prácticas profesionales y trabajos académicos.
Formación académica. El nivel profesional es fundamental a la hora de saber si un candidato es apto para ocupar una posición. Como valor agregado la persona puede realizar seminarios, diplomados y especializaciones entre otras áreas, para adquirir conocimientos extras y tener más oportunidades en el campo laboral.
Entrevista. Ésta es la oportunidad para que usted dé su mejor impresión. Debe prepararse con anterioridad, llegar puntual a la cita, ir bien presentado para la ocasión, conocer a profundidad su perfil profesional y la información que suministró en su hoja de vida.
Primero deberá romper el hielo con el entrevistador, después deberá hablar de su discurso, es decir, sustentar la información que colocó en la hoja de vida, y por último tendrá una fase de cierre, donde podrá hacer preguntas y le aclararán algunas cosas acerca de la oferta de trabajo.
Iniciativa. Las empresas están buscando candidatos que le aporten valor agregado a su trabajo; no sólo basta con tener la experiencia y los conocimientos necesarios, sino la disposición ante el puesto de trabajo a ocupar.
Usted deberá mostrar que es una persona que se preocupa más por mejorar los resultados que por hacer sus tareas diarias; esto lo puede hacer citando en su currículum o entrevista laboral, las metas que se ha propuesto en cada cargo desempeñado y sus respectivos logros obtenidos.
Adaptación al ambiente laboral. Aunque usted no lo crea el proceso de selección para una empresa representa una inversión; es por eso que los seleccionadores deben estar seguros del candidato que se va a contratar y descartar todas las posibles causas que llevan a despedir a un profesional.
Por lo anterior, es importante que usted tenga claro a qué ambientes laborales se puede adaptar y demostrar que es una persona abierta al cambio.
Recuerde ingresar su hoja de vida y encontrar más información en http://www.aliadolaboral.com/
1 comentarios:
Que buen artículo. Ojalá sigan haciendo más sobre información de selección.
Publicar un comentario